sábado, mayo 18, 2024

Hacer las paces

Grisbel Medina R.

Esta semana tuve el privilegio de hablar ante 80 mujeres de una institución pública. Mi compa Amalfi Eguren me compartió una melodía de meditación y la utilicé para invitarlas a cerrar los ojos y desanudar juntas el perdón.

Caminé entre mujeres de distinta edad, roles, con sueños, caminos pendientes, desilusiones, trofeos, progresos, dolores. Y nos perdonamos por circunstancias inconcebibles: una broma pesada, un comentario discriminatorio, por torpedear un proyecto, por acunar un ¨no me cae bien¨.

Y lo más importante, nos perdonamos a nosotras por ser tan ingratas con el cuerpo, por exigirnos tanto, por asumirnos mujer maravilla y querer, como dice Irene Morillo ¨hasta fumar debajo del agua¨, resultando ¨una mujer agotada, dividida entre lo que quisiera ser y lo que demanda la sociedad¨.

A partir de ahí, sentimos los hombros más livianos. Nos quitamos el peso de la mochila mental y real que nos reta a llevar capa, a salvar y cuidar de todos, a ser para los demás y para nosotras…nada.

Entonces hicimos las paces con nosotras, con la compañera, con la madre, con la supervisora. Comprobamos que, aunque somos diferentes en color, estatura y criterio, las mujeres compartimos los mismos retos y padecemos los mismos desprecios.

Ante las mujeres que labran diariamente en CORAASAN me nutrí de una energía especial. Llevé algo para compartir y salí colmada de brío, confianza, compromiso. Y recordé a Gianny Liranzo cuando me dijo: ¨las mujeres debemos perder el miedo a compartir experiencias reales y conocimiento.  Esto es como la metáfora de la vela: su luz no se hace más pequeña porque se use su fuego para encender otras¨.

Mujeres: abatir la rivalidad culturalmente impuesta es la meta si queremos superar el lastre de la inequidad.

Para comunicarse con la autora: sonriete_gris@hotmail.com

RELATED ARTICLES

Most Popular

Recent Comments