La EMERGENCIA está movida. ¨Andan muchos virus¨, es consigna entre camillas. Tres madres sujetan a sus hijos para soportar los 20 minutos del oxígeno que ayuda a descongestionar.
La Dra. Quiñones intenta revisarle los oídos y la boca a Amín Arturo. Una tarea ardua ante un muchachito con fuerza de hombre.
Llega la doctora Rosa Morel y recibe el reporte de analítica y el resultado de rayos equis. Hay flema en uno de los pulmones. Hay que canalizar y eso supone sujetarlo entre cuatro personas. Ya me tiemblan las rodillas.
Rosa Morel es la pediatra que recibió a mi hijo al nacer. Le conocía desde el hospital Infantil Dr. Arturo Grullón. Luego me enteré que también fue pediatra de mi sobrino Miguel Jared.
Entre chequeo y estetoscopio, la médica sacó una botella de ponche de ciruela. Un regalo de Navidad para la madre de ojos embolsados y semblante preocupado.
La ricura artesanal, con etiqueta navideña, fue bautizada como Ponche Dra. Morel. Le prometí que le haríamos honor en Nochebuena, pero la tentación fue grande y degustamos el 23.
El detalle de la doctora disminuyó la ansiedad e impotencia por el hijo enfermo. Increíble como un gesto cariñoso ancla esperanza en un ámbito nuboso.
Un dato más: un equipo dirigido por la Dra. Rosa Morel cuando guiaba el Arturo Grullón, le salvó la vida a la sobrina de la amiga Yomaira del Rosario. Para entonces, con 17 años, la muchacha sufrió un accidente que la mantuvo 25 días en Cuidados Intensivos, con cerebro y fémur comprometido. ¨Su cuerpo se estremecía de un modo que la sujetaron a la cama¨, recuerda Yomaira.
En palabras de la madre de Pedro Luis, Isabella y Charlize, pacientes también de la Dra. Morel, la atención del hospital de niños con su sobrina ¨fue profesional, especializada, pero también muy humana y empática con los familiares¨.
Eran tiempos con mayor dificultad en la infraestructura y carencias, como la del tomógrafo que tardaron años en recibir. Además, la ex directora del hospital infantil no cayó en la trampa –ni sucumbió ante las presiones- para comprar a quien ¨había que comprarle insumos médicos¨ porque el suplidor era hermano del ex presidente Danilo Medina. Ella salió de la oficina con la frente en alto, abrazada a su reciedumbre y honestidad.
Es la doctora Rosa Morel, pediatra de Amín Arturo y médica capaz, honrada, noble…y, diestra con los ponches de ciruela.